Manipuladores telescópicos
Eje motriz Carraro italiano
El cuerpo se puede inclinar o nivelar
Cabina ROPS y FOPS
Los manipuladores telescópicos LGZT tienen una carga nominal máxima de cuatro toneladas y pueden equiparse con una gama de accesorios para satisfacer diversas condiciones complejas. Algunos ejemplos incluyen abrazaderas, pinzas, horquillas, cucharones, quitanieves, ganchos, plataformas simples y más. Estos accesorios son fácilmente reemplazables y se utilizan ampliamente en logística, construcción y fabricación para aumentar la eficiencia.
El manipulador telescópico LGZT puede incorporar hasta cuatro brazos telescópicos. El modelo WSC1840 alcanza una elevación de hasta 17,6 metros, ofreciendo un excelente alcance y estabilidad. Los brazos ajustables permiten un control preciso en diversas tareas de carga. El sistema de brazos garantiza estabilidad y seguridad, proporcionando un excelente control durante operaciones con cargas pesadas o a alta velocidad.
La cabina ergonómica del manipulador telescópico Vanse está equipada con ROPS y FOPS para protección contra vuelcos y caída de objetos, lo que mejora la seguridad en entornos hostiles. Cuenta con un sistema de circulación de aire a presión negativa y un HVAC eficiente, que reduce la fatiga del conductor y garantiza la comodidad. El diseño de la cabina ofrece visibilidad panorámica, minimizando las obstrucciones visuales y mejorando la seguridad del conductor durante la operación.
El diseño del cuerpo del manipulador telescópico es altamente flexible y adaptable, capaz de inclinarse o nivelarse fácilmente para satisfacer diversas necesidades y escenarios operativos. Esto garantiza un rendimiento operativo estable en entornos de trabajo complejos, mejorando la eficiencia y la seguridad del trabajo.
Las patas de apoyo hidráulicas de los manipuladores telescópicos mejoran el rendimiento al proporcionar un soporte estable, aumentar la capacidad de carga y garantizar el equilibrio. Su altura ajustable y sus capacidades telescópicas se adaptan a diversos terrenos, acelerando los procesos de trabajo y reduciendo los riesgos al tiempo que salvaguardan la seguridad del operador.
El puente italiano Carraro, equipado con un sensor de torque, garantiza un control preciso y estabilidad. La transmisión del manipulador telescópico LGZT sobresale en alta velocidad, resistencia al calor y capacidades de autoenfriamiento. La tecnología probada hace que Carraro sea más confiable, especialmente en climas extremos, con soporte global para un fácil mantenimiento.









